Es una lástima que haga casi un mes que no publico nada sobre videojuegos. Pero ya sabéis, a veces es más fácil disfrutar jugándolos que comentándolos. Sin embargo, hoy llegó el día de volver a tomar las riendas de la sección. Así que sin más, espero que el resto de post hayan conseguido suplir este supuesto vacío existencial, cosa que creo que se ha conseguido gracias a los aportes de nuestro nuevo miembro.
Hoy vengo a hablaros de Victoria 2, de la empresa Paradox ¿Qué decir de él? Pues para empezar que es un juego un tanto complejo, pero que una vez vas cogiendo los conceptos claves del mismo resulta muy, muy adictivo. Un juego de estrategia al más puro estilo Civilization. No os alarméis por la comparación odiosa, pues lo que tienen en común es la relevancia de los aspectos de gestión. De hecho, posiblemente sea lo único que tienen en común.
Sé que muchos de vosotros sois amantes del apartado gráfico de los videojuegos. Os aviso de antemano. En este juego, a pesar de que vais a necesitar un ordenador medio decente, gráficamente deja mucho que desear. Tiene lo justo y necesario. Tampoco se le puede exigir más, ya que el juego no brilla por ese aspecto. Del mismo modo que no tiene unos gráficos espectaculares, también afirmo que tal y como está compuesto el juego no los requiere ¿Por qué? Porque es un juego en el que la gestión ocupa lo más importante; con tener una interfaz aceptable, y éste la tiene, es suficiente. Un mapamundi que divide el mundo en provincias controladas por naciones, y menús que despliegan ventanas donde podrás regular la gestión de la nación con la que juegas ¿Para qué más?
No podemos dejar pasar por alto la temática del juego, y no me refiero a si es de estrategia. Victoria 2 es un juego que simula una era, muy en la tónica de los juegos de Paradox. Por ello, el éste está ambientado en el siglo XIX, y la partida, escojas la nación que escojas, empieza en 1835. Cabe destacar que es importante la selección de la nación, porque según la que escojas serás más o menos poderoso. Efecticamente, Victoria 2 es un juego histórico que trata de simular la posición mundial que ocupaban las naciones en el siglo XIX. Por eso no debería extrañarte ser un manta si escoges a Etiopía. Del mismo modo si escoges a Reino Unido o Francia puede que llegues a dominar el panorama mundial.
En la misma línea hay que tener en cuenta detalles que son de agradecer. El juego guarda eventos históricos para cada nación que te darán ciertos beneficios. En España está la famosa Desamortización de Mendizábal hacia las tierras de la Santa Iglesia, si juegas con Prusia tendrás la opción de unificar Alemania. Toda una serie de eventos que si son útiles para desarrollar tu objetivo en el juego, también son interesantes si sabes un poco de historia. Un elemento que puede pasar desapercibido para muchos, pero que puede suscitar en el jugador la curiosidad de "¿Qué pasaría si escogiera a otra nación?"
Por otro lado, el apartado técnico del juego es algo complicado. Administrar una nación requiere mucha información, y muchos recursos. Por eso la gestión está basada en una interfaz de menús. Estos abren ventanas donde veremos los apartados más interesantes de la ésta. Este es el caso del apartado de la producción, que se encarga de mostrarnos que provincias están industrializadas, y por supuesto lo que se produce. La industrialización de estas provincias no dependerá siempre de ti, con lo cual, la producción tampoco. Ahí es donde entra en juego el otro de los aspectos más fuertes del juego: el gobierno. Dentro de los tipos de gobiernos puedes elegir desde la monarquía absolutista hasta una democracia en la que el rey no pinta nada. Esto es importante, porque dentro de estos tipos de gobiernos siempre habrá partidos políticos, y es dependiendo del partido político que escojas, si es que eres rey, lo que determinará tu margen de maniobra en tu economía. Tanto por la parte de producción, como en la de la hacienda pública, englobada en el apartado de presupuestos. En este último hay poco que destacar, tienes varias opciones en las que decides lo que cobrarás de impuestos, y donde decides invertirlos. Así que recordad esto, si os gusta manejarlo todo, tened un partido lo más intervencionista posible, y una hacienda pública eficiente.
Además de estos factores más de gestión estatal, tenemos el apartado de población donde podrás ver la cantidad, y la clase. Obreros, campesinos, capitalistas, aristócratas e incluso burócratas, sin contar los que me dejo. Cada clase tiene una función dentro del estado, obviamente obreros y campesinos están muy relacionados con la producción. Pero también los aristócratas y los capitalistas que son los que invierten en la infraestructura. Claro que como ya dije antes todo depende del tipo de gobierno que utilices. Aun así, la población es importante por muchas más razones. No sólo marca actividad productiva, también la actividad militar. Cuántas más personas, más soldados podrás tener. Es algo a tener en cuenta cuando escojáis una nación, pues una nación con población puede ser un garante de progreso a pesar de estar atrasada.
Otro de los apartados que son interesantes son el militar y el diplomático. Pero el militar y el diplomático si es interesante. Como ya dije el poder militar que tengas dependerás de cuanta población dispongas para desplegar ejércitos. Pero también de las armas y tecnología que hayas investigado. Por otro lado, tenemos la diplomacia, algo en lo que el juego flojea un poco. No por ser inverosímil lo que ocurre, sino por el poco margen de maniobra que nos da. Para ser concreto, el margen de maniobra siempre dependerá de tu posición en la clasificación de potencias mundiales. En cuanto más arriba, más cosas podrás hacer, lo cual nos deja un poco asqueado si somos una nación insignificante.
El último apartado a destacar es el de la tecnología, porque el del Comercio os aconsejo que lo dejéis todo en manos de la IA ¿Qué decir de él? Pues que es bastante correcto. Hay 5 bloques en los que encontrarás tecnologías enfocadas a la parte que quieras potenciar con tu nación. Producción, comercio, etc, etc. Eso si, lo que tardes en descubrir nuevas tecnología vendrá condicionado por el índice de alfabetización y los puntos de educación que poseas. Por eso es bueno empezar, una vez hayas estabilizado los presupuestos estatales, que inviertas todo lo que puedas ahí.
En conclusión, Victoria 2 es un juego que merece la pena ser jugado. Posiblemente haya otros que te gustarán más. Pero todo se ha de decir. Es un videojuego muy correcto que nos planteará retos y horas de diversión, si es que gestionar y conquistar es lo que te interesa. No he comentado más del videojuego porque no quiero desglosarlo todo, pero sobretodo porque disfrutaréis más descubriéndolo vosotros mismos. Así que, ya sabéis. Jugadlo y ya me diréis.
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